El televisor sigue siendo uno de los artículos electrónicos favoritos de la población, a pesar del avance de otros dispositivos rivales que ofrecen portabilidad y polifuncionalidad, como los computadores, tabletas o celulares. Esta dura competencia ha impulsado a la industria de los televisores a renovarse e innovar, ya sea mejorando la definición o simplemente maquillando el aspecto de los aparatos.  

En esta senda, en 2010, explotó el boom por la tecnología en tres dimensiones (3D), un avance que siempre ha intentado estar presente en los contenidos audiovisuales, pero que nunca  ha logrado asentarse. Los intentos empezaron cuando el conocido director de cine James Cameron, estrenó la película Avatar (2009).  

  De inmediato la industria reaccionó y comenzaron a proliferar los televisores que permitían ver contenidos en 3D. En 2011 fue el peak de esta tecnología: la mayoría de las películas comenzaron a adaptarse al formato 3D y los usuarios empezaron a pagar  más en el cine para disfrutar de esta tecnología.

“La tecnología 3D en su momento fue muy llamativa pero no logró posicionarse decreciendo a una tasa de más de un 40% al año”, dice Ji Hee Lim, gerente de la División de TV y Audio de Samsung, empresa que anunció la semana pasada que dejará de fabricar televisores en 3D.

 

 

LG dice que sólo el 20% de los televisores que lanzarán este año tendrán 3D, frente al 40% que tenía esta tecnología en 2015. 

Sony en tanto anunció que sólo los modelos más costosos serán compatibles con esta función. Philips también dejará de fabricar televisores con esta tecnología este año.  

  Hoy, los fabricantes de televisores están apuntando sus esfuerzos en mejorar la calidad de la imagen de los dispositivos. “Los televisores con 3D fueron muy importantes para la industria entre 2010 y 2011, pero se encontraron con usuarios que no se sentían cómodos utilizando lentes en 3D”, explica Loo Wee Teck, jefe de Investigación de Productos Electrónicos de la consultora Euromonitor International.  

Uno de los principales problemas para el despegue de este formato, fue que para disfrutar su contenido, era necesario usar lentes especiales, que en su mayoría eran pesados o necesitaban baterías para funcionar. Si bien los fabricantes generaron alternativas para poder ver contenido en tres dimensiones, en muchos casos el resultado no fue el esperado.  

  La industria de los videojuegos también aprovechó el boom de esta tecnología. Nintendo estrenó su consola portátil 3DS en 2011, la que permitía jugar títulos en tres dimensiones sin la necesidad de usar lentes especiales. Sin embargo, a pesar de  que la consola de Nintendo ha sido un éxito para la compañía japonesa, la tecnología de visionado 3D fue muy criticada porque producía mareos a algunos usuarios. De hecho tiempo después la compañía estrenó el modelo Nintendo 2DS, la que además de tener un precio más económico, carecía de la tecnología 3D.  

Por su parte, LG se sumó al 3D el mismo 2011, anunciando el primer teléfono que permitía ver contenidos en tres dimensiones. Sin embargo, debido al escaso contenido para dispositivos móviles, los celulares con esta tecnología no lograron mantenerse en el mercado. De hecho Apple nunca se sumó a esta tecnología y optó por fabricar teléfonos con pantallas de mayor resolución.  

El futuro de los televisores  

Si bien el crecimiento de los televisores bajó un 22% en 2015 en Chile en comparación a 2014, según cifras Euromonitor, se espera que en los próximos años las ventas de televisores vuelva a crecer. “Las ventas totales de televisores para 2020 superarán los 260 millones, un 10% más que en 2015. Los televisores LCD, tendrán un gran crecimiento, se espera que Chile crezca un 8%”, dice Teck. 

Los esfuerzos de los mayores fabricantes están enfocados en que la Ultra Definición o 4K sea un estándar. El nuevo estándar es  cuatro veces más definición que el formato Full HD. Hace un par de años que se comercializan televisores con esta tecnología en Chile, hoy es posible encontrar modelos de 40 pulgada por 300 mil pesos .   

Pero no sólo la mejor definición ha predominado en la industria, el aspecto de los televisores ha ganando protagonismo por el interés de las personas”. La gente ha preferido distintas tecnologías, como los Smart TV, el 4K o UHD y los televisores curvos. 

Por otro lado, plataformas como Netflix funcionan en televisores inteligentes y tienen contenido para ultra definición, lo que hace aún más atractivas estas tecnologías en comparación al 3D.