Se creó con la intención de generar una “gran base de datos de hipertexto con enlaces mecanografiados“, para así, sincronizar y compartir información entre los computadores de la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN, su sigla en inglés). Sin embargo, este hecho dio pie al desarrollo de lo que hoy conocemos como World Wide Web, la red que permitió la existencia de los sitios web.
El 12 de marzo de 1989, el ingeniero en software Tim Berners-Lee, creó las bases en un documento llamado “Gestión de información: una propuesta”. Allí proponía establecer un sistema que permitiera interconectar a los usuarios del CERN, que opera en Suiza. Esa iniciativa se convertiría en diciembre de 1990 en el primer navegador, sitio web y servidor, que comenzó a funcionar, cuando se definieron los conceptos básicos de lo que sería la HTML (Lenguaje de Marcas de Hipertexto); el HTTP (Protocolo de transferencia de hipertexto) y el URL (Localizador Uniforme de Recursos).
Hasta el momento, no se podía entrar a navegar por páginas, solo se podían revisar archivos y enviar correos por medio de una red interna. Casi dos años después, en 1991, esto dio paso para conectar el primer servidor web externo.